Estimado Carlos Rubio
Es difícil de entender como la AEAP que organiza el festival Iberoamericano de Creatividad el Sol, excluye de su categoría de estudiantes a las escuelas privadas y los portfolio center de la concocatoria, reduciéndo la participación tan sólo a alumnos que estén matriculados en el momento del festival en Publicidad en Universidades españolas.
Entendemos que este festival es el ÚNICO en el mundo que considera que el talento de las nuevas generaciones está única y exclusivamente en las Universidades Españolas y cierra sus puertas a estudiantes de Iberoamérica que cursaron esta u otra carrera en años anteriores y a creativos con talento, procedan de donde procedan.
Desde hace unos años, la industria creativa se está transformando a nivel educativo, para mejorar los estandares de la creatividad publictaria. Iniciativas como Zinkproject, Miami ad School, Brother, la Escuelita u Underground, están contribuyendo con su cultura del portfolio a nutrir a la industria creativa de jóvenes más capacitados.
La responsabilidad en la educación creativa es una deuda pendiente en Iberoamérica,
que tiene que tomar ejemplo de festivales como el D&AD o el One Show.
Decisiones excluyentes como la que ha tomado la AEAP respecto a los jóvenes creativos, no solo no miran al futuro, sino que retroceden en el tiempo, anulando los esfuerzos entusiastas de muchos profesionales que creen cada vez más en la calidad creativa y en el compromiso de las agencias, clientes y educadores por mejorar el futuro de la creatividad publicitaria iberoamericana.
Sinceramente,
Jóvenes creativos a la sombra del sol
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